Uno de los primeros trámites que se realizan después del fallecimiento es la elaboración de la esquela, con el objetivo de informar del hecho ocurrido y que familiares, amigos y conocidos puedan dar su último adiós al finado.
¿Qué es una esquela funeraria?
Las esquelas funerarias, también conocidas como necrológicas, sirven para comunicar que una persona ha fallecido, qué relación tenía con la persona o personas que publican la esquela, e informar sobre la fecha de fallecimiento y el lugar donde se dará el último adiós. Las esquelas y necrológicas también sirven para dar un pésame público y ofrecer más detalles sobre el evento que se realizará en su honor, como misas de familia o si se realizará una cremación en un entorno íntimo.
Podemos diferenciar dos tipos de necrológicas:
- Esquelas físicas: Se publican en periódicos o tablones.
- Esquelas online o digitales: A diferencia de las anteriores se pueden consultar en periódicos online y páginas web de internet de tanatorios y funerarias. Además, en los últimos años, algunos periódicos locales publican las necrológicas y permiten tener obituarios, velas y recuerdos online. Los amigos y familiares pueden encender velas virtuales y escribir mensajes en honor a la persona fallecida, ofreciendo su cariño y respeto pese a la distancia. Por ejemplo, cuando no podemos ofrecer un arreglo floral para su despedida, estas plataformas nos permiten enviar flores virtuales.
En algunos casos, ante tragedias como el 11M o los atentados de Barcelona, también se crean memorias virtuales en internet, donde se publican fotografías, documentos virtuales y detalles que se depositaron en el lugar del suceso. La ventaja de este tipo de necrológicas es que son accesibles las 24 horas
¿Qué incluir en una esquela?
Cómo hacer una esquela no es sencillo, ya que en esos momentos la pérdida del ser querido todavía es muy reciente. Normalmente, los tanatorios ofrecen modelos de esquelas para asesorar a los familiares del fallecido y se incluye en los gastos cubiertos por el seguro de decesos. De esta forma, los datos que se incluyen en las necrológicas suelen ser los siguientes:
- Nombre del fallecido
- Edad al morir
- Lugar y fecha del fallecimiento
- Información sobre el funeral y entierro civil
Como algo opcional, también se pueden incluir los siguientes detalles en una necrológica
- Lugar de nacimiento
- Nombres de sus familiares directos y su parentesco
- Título nobiliario, reconocimiento o cargo relevante
- Recibimiento de los santos sacramento
- Símbolo de su religión: cruz para los cristianos, media luna para los musulmanes y una estrella de David para judíos
- Símbolos de paz o reposo agnóstico, como una paloma
- Pequeña reseña sobre la vida del difunto o frase en su recuerdo
- Fotografía del difunto
De esta manera, el esquema básico de una necrológica sería el siguiente:
- Primer párrafo: Nombre completo de la persona fallecida
- Segundo párrafo: Datos sobre el fallecido: edad y lugar del fallecimiento
- Tercer párrafo: igual que se hace en algunas inscripciones para lápidas, se pueden poner las siglas Q.E.P.D (Que en paz descanse) o D.E.P (Descanse en paz)
¿Dónde consultar las necrológicas?
Para consultar las esquelas de hoy o del día anterior, existen tablones cerca de puntos clave de la ciudad, como ocurre en Palencia, Burgos o Valladolid, donde las funerarias colocan las esquelas y necrológicas en papel de los fallecidos.
Si queremos encontrar las esquelas en internet, podemos hacer una búsqueda concreta, como por ejemplo “necrológicas Palencia” para llegar a la web de la funeraria o tanatorio donde se encuentra el fallecido y consultar los datos de la misa de familia o entierro.
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